"Educación y Aprendizaje sin fin"

Nuestro aprendizaje no tiene fin, todos los días aprendemos algo nuevo si es que deseamos hacerlo; un hecho concreto de esto que estoy diciendo, es poder estar en estos momentos capacitándome en el aprovechamiento de las TIC's.

domingo, 22 de junio de 2008

Uso de las NTIC´s

LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y COMUNICACIÓN, COMO HERRAMIENTAS AL SERVICIO DE LA CALIDAD EDUCATIVA

Se dice que las nuevas tecnologías de la información y comunicación –NTIC – permiten el acceso a bienes y servicios de información. Que no sólo cambian la forma de trabajar, los medios a través de los cuales nos comunicamos y aprendemos, sino también, las formas en que se distribuye la educación.
Pero que ocurre en la sociedad argentina, la desigualdad en la incorporación y apropiación de estas tecnologías con fines educativos es de dominio público, a saber: Restricciones de fondos, capacitación de personal, obsolescencia de hardware y software, entre otros; son factores que impiden dar adecuada respuesta a las demandas actuales de la educación. Esto por supuesto influye, en las perspectivas futuras de nuestros jóvenes, la competitividad de nuestras fuerzas sociales y económicas básicas, la adaptación a los cambios por parte de los docentes, y en particular, en los resultados de aprendizaje que alcanzan los alumnos.
Esta situación genera una discrepancia entre aquello que la mayoría de los estudiantes hacen y lo que la sociedad espera de ellos.
Una educación de calidad es el desafío fundamental que justifica la implementación de NTIC con el principal objetivo de que más alumnos aprendan más y mejor. Esta aspiración se manifiesta reiteradamente en muchos programas y proyectos educativos, pero aún no da muestra de real fertilidad, con el peligro y la tentación de incorporar herramientas poderosas para seguir haciendo lo mismo de antes.
Una cuestión interesante para el debate es qué nuevas competencias, capacidades, habilidades es necesario impulsar desde la incorporación de las NTIC. También, cómo multiplicar la oferta educativa, sobre todo en el área de la educación a distancia, teleformación y capacitación de recursos humanos.
La mera incorporación de NTIC no basta para cualificar al sistema educativo sino se acompaña de un cambio en el pensamiento que da sentido a las acciones. La aceptación y adaptación son prerequisitos que condicionan el éxito de cualquier propuesta de innovación, mejoramiento y cambio.
Este proceso es lento, gradual y de largo alcance para la comunidad educativa, en cuyo desarrollo se generan muchos y nuevos interrogantes que se acumulan a los ya existentes.
El gran interrogante es, ¿Cómo puede la escuela hacer un uso adecuado de las herramientas tecnológicas cuando existen diferentes niveles de apropiación social?. Esta pregunta pone en juego la necesidad de nivelar la apropiación de elementos de la cultura. Creo que es fundamental mejorar la disponibilidad de los docentes para capacitarse, incrementar las modalidades de capacitación a través de la incorporación de nuevas tecnologías, para otorgar flexibilidad horaria y accesibilidad física a la oferta; y por otra, brindar facilidades para acceder al soporte técnico y para el dominio
de recursos tecnológicos.
Beneficios de las NTIC aplicadas a la educación
A. Como recurso didáctico
El adecuado uso de las NTIC potencia la interacción docente-alumno y de los alumnos entre sí, facilitan el desarrollo de valores de colaboración y solidaridad en las actividades de aprendizaje, dinamizan el aula rompiendo las barreras físicas y temporales de ésta.
El aprendizaje a distancia se enriquece con un amplio rango de tecnologías de comunicación interactiva, que nos libera del modelo tradicional de difusión y comunicación sincrónica en un momento y lugar determinado: la teleenseñanza, el uso del correo electrónico para la discusión de ideas, las simulaciones en ambientes multiusuarios, la vídeo conferencia, etc.
Con la multimedia se hace uso del computador como herramienta para la integración de audio, vídeo, sonido, imágenes, texto, animación, entre otros, simulando y recreando ambientes que estimulan el progreso y optimización del pensamiento crítico para la resolución de los problemas que se presentan en el mundo actual. Como es sabido el progreso del pensamiento se traduce en la vida social y cotidiana, se vincula con el juicio moral y el logro de la autonomía para mejorar la
propia vida y la de los demás.
B) En la gestión escolar.
Los procedimientos y software en red permiten efectuar diagnósticos tempranos en los distintos niveles, áreas y modalidades del sistema, actualizar datos en tiempo corto, proyectar futuros escenarios, evaluar y tomar decisiones sustentadas en información confiable. La conectividad permite que la información circule a mayor velocidad y en todos los sentidos posibles, logrando conformar un entorno inteligente tendiente al desarrollo de trabajos colaborativos en diferentes
circuitos escolares.
Concluyendo
Un empleo inteligente de las NTIC conduce a reflexionar sobre qué se enseña, cómo se enseña y por qué se enseña, a la identificación de competencias culturalmente deseables y a la reflexión acerca de los modos en que la tecnología puede contribuir al acceso de bienes y servicios educativos.
También, exige de la comunidad educativa una renovación y ampliación de conocimientos, competencias, experiencia, habilidades, actitudes y valores en una atmósfera de intercambio y construcción compartida y una atención constante puesta en los cambios tecnológicos que se producen, un entrenamiento en la verdadera interdisciplinariedad y una revalorización de las actividades de investigación y acción en las aulas.

Incorporar el uso de las TIC´s en el Profesorado

"La tecnología cambia la potencia del proceso pedagógico”
El debate en torno a la incorporación de las nuevas tecnologías
al proceso de enseñanza-aprendizaje crece en el país y
presenta cada día nuevos desafíos, en especial para los
docentes. En diálogo con EducaRed, la pedagoga Mariana
Maggio, Gerente de Programas Académicos de Microsoft de
Argentina consideró que el actor clave en este proceso es el
docente, convenientemente motivado para impulsar el uso de
las nuevas tecnologías en el trabajo educativo. En su visión, el
acceso al equipamiento es importante, pero subrayó que todos
los esfuerzos serán limitados si no se dispone de buena conectividad.
EducaRed: En la actualidad, muchas organizaciones sociales y empresariales
colaboran con las política públicas en la dotación de equipos o la provisión de
software para mejorar la infraestructura tecnológica de las escuelas. ¿Alcanza con
eso para decir que se está avanzando en una inserción real de la tecnología en el
proceso educativo?
Mariana Maggio: Yo suelo hablar de “inclusión genuina”, una categoría que desarrollé como
parte de mi trabajo de investigación. La inclusión genuina intenta captar aquellas situaciones
en las que las nuevas tecnologías son incorporadas a las prácticas de la enseñanza,
emulando las relaciones de la tecnología con el campo disciplinar.
Para dar un ejemplo concreto, hoy la matemática se ve fuertemente impactada por el
desarrollo de simuladores o la geografía por los sistemas de representación espacial a través
de multimedia. La inclusión genuina intenta dar cuenta de esto, en un nivel epistemológico
de cuáles son las relaciones entre las nuevas tecnologías de la información y la
comunicación en cada campo disciplinar. Es una cuestión, si se quiere, de actualización del
conocimiento que ofrecemos.
El problema no es que las escuelas tengan computadora o que haya una computadora por
docente o por niño. El tema es mucho más complejo, del orden del conocimiento, del orden
de qué son los campos disciplinares en la actualidad. El modo de entrar a ese problema
tiene un componente de infraestructura pero tiene otro componente esencial que es una
conectividad de calidad. Y tiene un pilar indispensable que es la formación.
ER: ¿Existen diferentes motivaciones para el abordaje tecnológico entre los chicos,
quizá más habituados a la tecnología, y los docentes, no siempre formados en este
aspecto?
MM: Es cierto que los chicos de esta generación, aún los que no tienen computadora en su
casa, se relacionan muy bien con la tecnología. Pero en general vemos que la relación de los
chicos con la tecnología está muy vinculada al ocio, al entretenimiento, al espacio del juego.
Eso está muy bien pero, en realidad, como educadores debemos pensar cómo generamos
potencia a través de esas herramientas en relación con el aprendizaje, a las finalidades
educativas, en relación con la condición de ciudadano.
Cuando se lo plantea en estos términos, hay algo que es imprescindible: no son las
máquinas, son los docentes. Los docentes tienen que estar preparados, aunque esto no
resulta sencillo. Por un lado, porque la mayor parte de nuestros docentes no nacieron
teniendo estas tecnologías a disposición. Pero lo más difícil de abordar es que no analizaron
estas cuestiones como parte de su formación inicial. Seguimos formando profesores para los
cuales la tecnología y la educación no aparecen en su formación básica. Entonces, a un
docente que ya está en el aula y para quien la herramienta central son los manuales
impresos, hay que decirle que ahora debe aprender todo esto.
ER: ¿Cree que hay una deficiencia en la formación?
MM: Sí, es un tema de formación. Hoy se hacen muchos esfuerzos pero el desafío es
enorme. Por supuesto, necesitamos políticas muy contundentes vinculadas a la formación de
los docentes en estos temas, pero también precisamos un esfuerzo de articulación con el
sector privado, con las ONG, con las organizaciones de la comunidad. Hay muchos trabajos
valiosos pero que siguen siendo esfuerzos aislados. Hoy el principal desafío es cómo
articular los esfuerzos tanto del sector privado, como del Estado y el tercer sector.
ER: ¿El problema es la falta de una política integral?
MM: Sí, sobre todo porque, por ejemplo, cuando se hacen eventos de formación de docentes
en nuevas tecnologías, repetidamente vemos que siempre se interesan los mismos
docentes, que son un 20 o 25 por ciento del universo de docentes. Lo mismo pasa con los
concursos de innovación educativa. Entonces, éste es un tema importante pero para un
sector del sistema educativo que todavía sigue siendo minoritario.
La pregunta es cómo nos articulamos para poder amplificar los esfuerzos y llegar a
muchísimos más docentes. Hay que llegar a cientos de miles de docentes que todavía no
han hecho su proceso de iniciación en nuevas tecnologías. En el programa Alianza por la
Educación trabajamos con un evento específicamente diseñado para iniciación que se llama
Intentar. Está concebido de modo tal que los docentes no habituados a las tecnologías
puedan empezar, suscribiendo su primera cuenta de correo electrónico, hacer su primera
experiencia de navegación, visitar los portales educativos que son más potentes en términos
del escenario nacional.
ER: ¿Hay resistencias de los docentes a la incorporación de tecnología?
MM: En el trabajo con los adultos aparecen resistencias que no aparecen en los niños. En
este sentido, hay dos actores clave: por un lado, los directores de las instituciones
educativas y por el otro, los inspectores y supervisores. Los proyectos con cierta innovación
que a veces aparecen en las escuelas en una muy pequeña escala, se amplifican al interior
de la propia institución o logran relacionarse con otras organizaciones de la propia
comunidad cuando hay una fuerte decisión de los directivos para acompañarlos.
ER: ¿Qué pasa con la brecha digital al interior de la sociedad argentina? ¿Cómo puede
pensarse en una entrada a la era tecnológica cuando en el país todavía hay miles de
chicos que van al colegio para tomar la copa de leche y ni siquiera acceden al libro?
MM: El esfuerzo debe ser muy fuertemente orientado por el Estado. Es necesario pensar en
cómo garantizamos el acceso a la tecnología en las escuelas de gestión estatal, en las
bibliotecas, en las bibliotecas populares, en las sociedades de fomento, en los clubes del
barrio. Ese es el camino para que en el corto plazo todos puedan acceder.
También hay que pensar en los locutorios, porque los chicos de los sectores urbanos
marginales hoy acceden al locutorio, que si bien tiene un costo, es un costo bajo. Hoy ese
espacio está destinado al ocio y al juego, pero podríamos empezar a pensar como sociedad
cómo promovemos espacios de enriquecimiento cultural, cómo hacemos para que los pibes
de esos barrios puedan generar, por ejemplo, arte digital, acceder a los museos, recuperar el
patrimonio cultural de las comunidades locales, trabajar con los diarios. Ahí la tecnología
cambia la potencia del proceso pedagógico. No es lo mismo que la tecnología esté o que no
esté.
ER: ¿Cómo está la Argentina frente a otros países de América Latina en términos de la
tecnología aplicada a la educación?
MM: Yo la veo con preocupación. Tenemos que tomar algunas decisiones necesarias. Entre
las principales destacaría las que tienen que ver con la conectividad, otras las que tiene que
ver con la formación docente y la tercera tiene que ver con pensar en el lugar clave que
tienen que jugar en este proceso de incorporación de tecnología los docentes.
Uno de los errores que podemos cometer es pensar que si ponemos la tecnología a
disposición de los chicos con esto cambia el sistema educativo. El sistema educativo
depende del liderazgo de los docentes, la responsabilidad por la enseñanza es de las
instituciones educativas y que se cumplan las finalidades educativas depende de que los
docentes enseñen.
Es importante que los profesores y profesoras sepan que, vinculados con la tecnología, hay
nuevos temas. Entender qué implica enseñar a hiperleer en lugar de enseñar a leer, qué
implica tener a disposición materiales multimediales en lugar de materiales escritos lineales,
qué implica acceder a fuentes en línea, qué implica la posibilidad de establecer redes para el
desarrollo de proyectos de colaboración. Hay toda una agenda nueva, pero esa agenda hay
que discutirla con los docentes y hay que ver cómo hacemos para que esa agenda dé cuenta
de lo que tenemos que enseñar.
ER: ¿Qué experiencias exitosas puede mencionar en América Latina respecto de la
inclusión de las TICs en el proceso educativo?
MM: Me interesa mucho el caso de Chile, donde hay un programa de conectividad (Enlace),
que conecta a todo el sistema educativo a Internet con recursos públicos, y con una
estructura de mantenimiento dependiente de las universidades. El país fue dividido en
grandes regiones y se asignaron universidades a la gestión de esas regiones, garantizando
el soporte técnico.
En los últimos años, México hizo un esfuerzo muy grande con Enciclomedia, un proyecto que
dotó con tecnología de pizarrones electrónicos a un grado de la escolaridad, pero
accediendo todas las aulas del sistema público. Este proyecto pone en un soporte
multimedial todo el contenido del libro de texto único.
Pero no quiero dejar pasar que también que hay muchos casos para aprender en la
Argentina, que tal vez no tienen la escala pero sí la potencia de los otros. Desde Alianzas
por la Educación, en conjunto con Foro 21, el programa de educación de canal 7, hemos
documentado más de 80 casos de docentes de diferentes provincias que utilizan la
tecnología e innovación en el país. Estos docentes son argentinos, trabajan en condiciones
de infraestructura muchas veces escasas y difíciles pero, sin embargo, creen que el acceso
a la tecnología es valioso y significativo para los chicos. Con esa convicción desarrollaron
propuestas que para mí son ejemplares. Con esto hicimos un portal que se llama
Neodocentes, y ahí están documentadas en video las experiencias.
ER: ¿La tecnología es una herramienta que facilita el trabajo en el aula?
MM: Son tiempos difíciles para la mayor parte de los docentes del país, por las condiciones
salariales, la infraestructura de muchas escuelas. Los docentes se enfrentan a temas nuevos
y preocupantes para los cuales no están preparados, como la heterogeneidad, los grupos
minoritarios en el aula, la violencia en la escuela, y a esto hay que sumarle el problema de la
tecnología. En principio, los docentes ven que tienen un problema más. Pero en ese camino
de ofrecer soluciones, la tecnología puede ayudar a reconstruir el protagonismo del docente,
no sólo al interior de la escuela sino también en su comunidad

sábado, 21 de junio de 2008

Computación ¿SI o NO?

COMPUTACIÓN: EL DESAFÍO DE APRENDER". CLARÍN.
13/5/85 HILDA WEISSMANN
"La introducción de las computadoras en la escuela es probablemente uno de los
hechos que provocan hoy en día mayores discusiones en la comunidad educativa.
Aferrados fanáticamente a sus respectivas posiciones están quienes opinan que será la salvadora de la educación; que los que lleguen al siglo XXI sin saber computación serán como los analfabetos del siglo XX, que la máquina modifica la forma de aprender y de pensar. "No quiero que mi hijo sea un discapacitado mental" dijo textualmente un papá cuyo hijo acababa de cumplir 8 años, mientras lo inscribía en un curso de enseñanza de la computación.
En el otro extremo se encuentran los que opinan que es una moda a la que unos pocos pueden acceder; que agudiza las diferencias sociales entre los chicos, que estimula conductas solitarias, que tiende a suprimir la función del docente. Más allá del análisis de cada una de estas posiciones, es un hecho innegable que la escuela sigue siendo una institución conservadora que tiende en, primera instancia, a rechazar el cambio. Recordemos las resistencias para introducir la matemática moderna, la gramática estructural, el uso de las calculadoras o la libre expresión plástica, que aun hoy para muchos maestros parece ser una
propuesta apropiada y acotada a las clases de actividades plásticas pero "no para el cuaderno", donde queda "más prolijo y más lindo" pegar una figurita. ¿Quizás porque los próceres no se dibujan?
En todo caso, el temor a toda clase de cambio, los prejuicios, nos están haciendo
perder la fascinante oportunidad de crear, de equivocarnos y, a partir de los errores y aciertos, inventar nuevas propuestas, modelos educativos, métodos de aprendizaje. Mal se podrá desarrollar en los alumnos la tan mentada "actitud favorable al cambio" cuando la propia escuela transmite una actitud paralizante. Obviamente, no dejo de reconocer, con esta afirmación, la actitud individual de muchos docentes y escuelas que no entran en esta descripción y que, por el contrario, luchan creativamente por un cambio en la educación. Es también cierto que la inclusión de las computadoras, insertas en una estructura tradicional, no
hacen más que convertirla en una isla, como una propuesta disociada del resto del quehacer educativo, casi como una concesión que tranquiliza a los modernizantes sin perturbar su entorno pero que, como toda isla, no logrará crecer ni transformarlo.
Un ejemplo es el dictado de la matemática, donde es frecuente que los maestros
enseñen "teoría de conjuntos" durante marzo y abril y continúen desarrollando el resto de los contenidos con un enfoque absolutamente tradicional, desvinculado de la teoría conjuntista.
Es por ello que la computación por sí misma no podrá transformar la educación; tanto es así que también es posible enseñar computación con un criterio tradicional.
DEFICIT
Pero la realidad nos muestra un país con un alto déficit en construcciones escolares que, entre otras consecuencias, determina que algunas escuelas secundarias tengan divisiones de hasta cincuenta alumnos, con un bajísimo presupuesto para la adquisición y reposición de recursos didácticos. En circunstancias semejantes es obvio que queda librado a la colaboración
de los padres, a través de las cooperadoras, la compra de elementos básicos, con incapacidad presupuestaria para plantear un amplio plan de becas para disminuir uno de los factores fundamentales de la deserción escolar. Pareciera entonces que plantear un plan extensivo de enseñanza de la computación no responde a las necesidades prioritarias en materia educativa.
Es, sin embargo, fundamental transformar los prejuicios en juicios. Crear spacios
experimentales, en una muestra realmente significativa que abarque todo el país y a todos los grupos sociales, e insertándola simultáneamente en instituciones que plantean proyectos renovadores en todas las áreas de aprendizaje y, paralelamente, en escuelas que podríamos llamar tradicionales. Recién entonces, y junto con un proyecto de evaluación permanente, se hará la luz acerca de los beneficios potenciales de la enseñanza de la computación.
Pero no todos son prejuicios en tanto hay ya un camino hecho que, aunque reciente, no deja de ser menos valioso. Me refiero a la experiencia que tanto en el extranjero como en nuestro país vienen desarrollando diferentes grupos.
Coincido con aquellos que piensan que sólo es significativo el aprendizaje a través de la computación cuando es el propio sujeto quien programa la computadora. Como ante cualquier situación de aprendizaje, el chico, el adolescente, son sujetos que aprenden básicamente a través de su accionar, que construyen sus categorías de pensamiento a medida
que pueden resolver interrogantes. Conocer es el resultado de un proceso constructivo en el transcurso del cual se van generando los instrumentos intelectuales que lo hacen posible y que son, a su vez, generadores de nuevas formas de conocimiento. Un sujeto activo es aquel que compara, incluye, clasifica, predice, comprueba, reformula. La computadora no lo califica; el
chico no teme equivocarse. Cada "error" implica un nuevo desafío de aprendizaje, es algo sobre lo que debe seguir pensando.
Finalmente, y retomando el planteo inicial, pienso que es absolutamente falsa la
dicotomía computadoras ¿sí o no? Ningún producto de la tecnología es de por sí negativo o positivo. Es un medio, dependerá del uso, y, en este caso particular, dentro de que proyecto educativo se inserte para decidir cuándo y cómo incluir masivamente la computación en la escuela argentina."


Dejen sus opiniones.

domingo, 8 de junio de 2008

SERENATA PARA LA TIERRA DE UNO

BELLÍSIMA SERENATA DE MARÍA ELENA WALSH A NUESTRA TIERRA


Porque me duele si me quedo
pero me muero si me voy,
por todo y a pesar de todo, mi amor,
yo quiero vivir en vos.
Por tu decencia de vidala
y por tu escándalo de sol,
por tu verano con jazmines, mi amor,
yo quiero vivir en vos.
Porque el idioma de infancia
es un secreto entre los dos,
porque le diste reparo
al desarraigo de mi corazón.
Por tus antiguas rebeldías
y por la edad de tu dolor,
por tu esperanza interminable, mi amor,
yo quiero vivir en vos.
Para sembrarte de guitarra,
para cuidarte en cada flor
y odiar a los que te castigan, mi amor,
yo quiero vivir en vos.